jueves, 11 de marzo de 2010

El paraíso de Indonesia: las islas Gili

Día 133
Lombok – Gili Trawangan

Bien, bien, nos vamos hacia las islas Gili. Es un nombre absurdo, porque ‘Gili’ en indonesio significa ‘Isla’, así que íbamos a las islas ‘Islas’. Son tres islas, la mayor Trawangan (o Gili T), la menor Gili Meno y la mediana Gili Air. Para ello, lo primero es llegar al puerto de Bangsar, en el extremo noroeste de Lombok, pues las Gili pertenecen a Lombok.

Primero, desayuno y recogida a las 8 de la mañana. Casualmente, viendo las noticias vemos que el Madrid ha sido eliminado por el Lyon, ¡vaya tela! La furgoneta nos lleva hasta Bangsar en 1 horita, y allí nos esperan todos los estafadores josputa. Lo más curioso es que te dejan en un bar, para que consumas, mientras te vuelven locos con los billetes, cambiándolos hasta dos veces en media hora. Al salir, te empiezan a meter en tuk-tuk tirados por burros, para hacer 500 metros y pagar, claro está. Nosotros, cargamos las mochilas a la espalda y andamos los 5 minutos que se tarda hasta el puerto. De camino, todos quieren venderte algo mintiendo: agua (argumentando que es muy caro en las islas), repelente (diciendo que el dengue es muy común y no hay repelente en las islas), etc. Eso sí, todo, 5 veces más caro.

Esperando en el puerto, te venden de todo, hasta drogas, sin problemas.


El barquito era una buena experiencia de locales y movimiento. Se movía más que la compresa de una coja, y en una horita ya estábamos en Gili T. A buscar hotel. En la isla, se han montado una historia muy sostenible y todos tienen el mismo precio. Con aire un precio, sin aire otro. Con agua fresca no hay extra, por agua caliente, sí. La única forma de negociar es decir que te vas a quedar más de 4 ó 5 días, y tampoco es un ahorro muy sustancial. Así que optamos por quedarnos en la calle principal, a 20 metros de la playita, en el hotel Beach Wind, que era genial y los dueños eran muy buena gente.


Importante, no hay vehículos motorizados en ninguna isla, haciéndolas inmensamente tranquilas.


Las formas de los bungalows en las islas Gili son muy curiosas, manteniendo la misma forma en todos los hoteles. Decidimos ir a comer y a darnos un chapuzón, llevando las máscaras de bucear que alquilamos en el mismo hotel, servicio completo.


Venden setas alucinógenas por todas partes, con total impunidad.


El buceo fue genial, y estuvimos nadando con tortugas gigantes, ¡flipante! Lo único a tener en cuenta es que la corriente entre las islas es fuertísima, y hay que ir con pies de plomo. En cuanto entras en el agua, totalmente cristalina, ya puedes empezar a ver peces y coral increíble, hasta que llegas a la barrera de coral, donde baja la profundidad de golpe a 15 metros.


Tras el bañito, caminamos un poco para conocer la isla, pasamos un rato en el centro de conservación de tortugas, que es básicamente un criadero en el que liberan unas 1200 tortugas cada año.

Volvimos a ducharnos y salimos a cenar, buscando algún restaurante puramente local, con buen precio. Descubrimos el Kiki Novi, que tenía los precios que nos gustaban, lejos de los precios y comidas occidentales de todos los restaurantes de la primera línea de mar.

Una cosa muy curiosa es que en Gili T, la única isla que tiene algo de vida, se turnan las fiestas en temporada baja para concentrar a todos los turistas en un único bar, y la fiesta diaria va rotando cada día de bar en bar, excepto el Jueves, que es día libre y se descansa. Al menos, teníamos una familia gatuna que nos hacía compañía y que se instaló en nuestro porche: la mama y sus 4 gatitos.


Control de Gastos:
- Transporte a Gili: 100000 IDR (8,06 €)
- Comida: 135000 IDR (10,89 €)
- Máscaras: 10000 IDR (0,81 €)
- Cena: 91000 IDR (7,34 €)
- Bebidas80000 IDR (6,45 €)
- Hotel: 130000 IDR (10,48 €)

No hay comentarios:

Publicar un comentario