martes, 6 de julio de 2010

Montando a caballo por el Lago Terkhiin Tsagaan y el volcán Nuur

Día 224
Mongolia Central (Parque Nacional Terkhi)

¡Vamos a montar a caballo! ¡Vamos a montar a caballo! Los 6 juntitos, con dos guías. Elena y Marketa estaban acojonadas. A mí, por desgracia, me dieron el más pequeño. ¡Pero coño si soy el más grande del grupo! La palabra clave para montar en Mongolia es ‘Chou’ (o Chu, según la zona), que es lo que indica al animalico que tiene que empezar a correr, con el vaivén que provoca, y los saltitos. Solamente hay que protegerse las bolas, que no paran de golpear cada vez que el caballito se pone a trotar.

El objetivo era llegar hasta el volcán del Parque Nacional de Terkhi con los caballos, comer allí, tomarnos unas birras, y luego volver. Para hacerlo más divertido, le puse el nombre ‘Billy’ a mi caballo. El guía nos corrigió y nos dijo los nombres verdaderos, que eran muy largos, y todos terminaban en ‘mur’, por lo que le cambié el DNI a ‘Billy-Mur’. Y todo el camino: “Chou, Billy-Mur, Chou”, y al galope por los prados.

Subimos hasta el cráter del volcán, pero andando, porque dejamos los caballos atados abajo, con los guías. Por lo visto, había explotado hacía 7000 años, pero todo el paisaje estaba lleno de roca volcánica. Interesante.

Como no lo decía en las reglas, decidimos beber birra y fumar en el caballo: “Chou, Billy-Mur, Chou”. Hasta incluso paramos un ratito para darles de beber en el lago, y seguíamos con nuestras carreras. Menos Elena, que tenía un caballo un poco loco y tuvo que cambiarlo por el de Nir. Yo también tuve que parar, pero para mear. El guía flipó cuando le dije que tenía que bajar urgentemente… Y cuando bajé me puse a descargar. ¡Es lo que tiene la cerveza!

Una vez regresamos, nos tocaba cocinar el pescadito, porque nuestra querida y local Ogra dijo que no sabía cocinar pescado, así que pasaba de intentarlo. Pero antes, un buen chapuzón en el lago, con ducha incluida, que llevábamos ya dos días sin ducha, y las toallitas húmedas no eran suficiente, jeje. El agua estaba congelada, pero molaba volver a estar limpito. Lo mejor fue que como estaba tan fresquito, pudimos meter unas birretas y unas botellas de vodka y naranja para hacer más amable el paso del tiempo.

Como las chicas casi no podían estar cerca de Ogra sin que ésta se volviese loca, y todo el equipamiento de cocina estaba en su Ger, nos tocó cocinar a mí y a Nir. Cortar el pez sin utensilios correctos se hizo complicado. Al final, tuvimos que pillar una especie de cuchillo, y darle golpes en la parte alta con una estaca. ¡Funcionó! Para cocinar, solamente un poco de ajo, sal y aceite, más unas patatas fritas. ¿Veis como en Mongolia también se puede comer normal? :DD

Tras la cena, sacamos los sacos de dormir y las bebidas y nos tumbamos en el césped a ver el cielo, que era increíble. Nada de polución, una noche estrellada realmente brutal, con alguna estrella fugaz y tal.

Control de Gastos:
- Bebidas: 5000 MNT (2,98 €)

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